Paraíso destrozado

Me pintaste un paraíso de flores.

Prometiste estar a mi lado

en un lindo mundo de colores,

en nuestro paraíso encantado.

Me juraste mil días de amor,

me juraste mil caricias,

prometiste amarme con pasión

y cumplir mis fantasías.

Tus palabras el viento las elevó,

y mi sonrisa se desvaneció

al ver como el viento las arrastró.

Lejos muy lejos las llevó,

y tu rostro mi mente dibujó

pero pronto mi mirada lo borró

con tristes lágrimas de amor.

Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.

Este verano, yo no iré.

¿Te gustan los animales? A mí sí.
En concreto, me encantan las orcas. Es mi animal favorito desde que vi la saga "Liberad a Willy", cuando aún era muy pequeña. De hecho, aún conservo la cinta VHS de las películas.

Sí, las vi cuando aún era una niña y no entendía muchas cosas. Lo único que veía era un animal precioso y majestuoso que hacía trucos graciosos. Era toda una soñadora, por lo que deseé ser entrenadora de orcas cuando me hiciera mayor. Pensaba que ese era el trabajo perfecto: pasar cada día de mi vida con mi animal favorito, ser su amiga, nadar juntos, enseñarle trucos, etc.

Poco a poco fui creciendo, pero no por ello dejé de ver la saga una y otra vez, hasta saberme las escenas, los diálogos y las canciones de memoria. Eso me permitió ir entendiendo mejor la trama, y pasé de querer ser entrenadora de orcas a desear trabajar como bióloga marina para viajar por los mares y atender orcas para luego liberarlas y así ser su amiga.
Recuerdo que cuando me enteré de que en el gran zoológico de la isla vecina había inaugurado un espectáculo con orcas volví locos a mis padres para que me llevaran a verlo porque deseaba con todas mis fuerzas ver esos animales en vivo y en directo.
Fuimos al zoo y no voy a mentirles, disfruté como niña que era, saqué un millón de fotos y me deleité con mi sueño cumplido, por fin pude ver a esos animales en directo, en persona. Hicieron un espectáculo alucinante y yo quedé encantada.

Cuando tuve la edad suficiente como para tomarme la vida más en serio y ser consciente de todo lo que transmitía el argumento de la película decidí rotundamente olvidarme de mis sueños anteriores. Ya no sabía qué quería ser de mayor, pero no quería entrenar orcas.
Pronto me di cuenta de que la orca que aparecía en la película tenía nombre, era real y tenía una historia. Keiko fue la orca que logró que yo me enamorara de estos animales, pero Keiko tiene una historia tras las cámaras de "Liberad a Willy".

Keiko fue una orca macho que nació en Islandia en 1976. Fue la primera y única orca que vivió en cautiverio y retornó a su hábitat natural. Conocida mundialmente por su participación en la saga de películas Free Willy.

Fue capturada cuando sólo tenía cerca de 2 años de edad frente a las costas de Islandia, en el año 1979. A partir de entonces perteneció a la industria de los parques acuáticos, iniciando su nueva vida en un acuario islandés de Hafnarfjörður.

Tiempo después el acuario islandés vendió a Keiko al parque temático Marineland, en Ontario, Canadá, y se integró a los espectáculos públicos. Sin embargo, comenzó a padecer problemas de salud que incluían lesiones en su piel a causa de la mala calidad del agua.

Posteriormente fue vendida al parque de atracciones Reino Aventura, en la Ciudad de México. Durante su estancia ahí, Keiko se convirtió en un animal muy popular y en la principal celebridad del parque. Incluso la cantante Lucero interpretó temas musicales dedicados a la carismática orca.

Pero no todo eran sonrisas y alegría. Keiko había crecido y su tamaño era muy grande para el pequeño estanque donde vivía. Nadaba en círculos, tenía un bajo peso y pronto desarrolló otras lesiones en su piel. Su vida corría peligro.

En los primeros años de la década de 1990, la compañía hollywoodense Warner Bros. inició la búsqueda de una orca entrenada que diera vida al personaje en la película Liberad a Willy (Free Willy) y encontró a Keiko. La orca conquistó la pantalla al interpretar al amigo de Jesse, el personaje que se encarga de llevar a Willy hacia la libertad.

La situación de Keiko se convirtió una preocupación, ya que los médicos que la revisaron manifestaron que existían probabilidades de muerte si permanecía en Reino Aventura. Muchas personas se unieron a los esfuerzos por salvar a Keiko; se realizaron donaciones públicas y hasta la productora Warner Bros. apoyó económicamente la construcción de un estanque en el Oregon Coast Aquarium, en el estado estadounidense de Oregon. En febrero de 1995 se fundó la Free Willy-Keiko Foundation, gracias en parte a la generosa donación de un millonario.

En 1996 Keiko fue trasladada por vía aérea hasta el Oregon Coast Aquarium y se adaptó a su nuevo hogar. Durante el tiempo que permaneció ahí recuperó salud y peso y se le comenzó a enseñar a cazar. No obstante, esto no era suficiente.

Se tenía la intención de devolver a Keiko a su hábitat natural, tal como en la película, y se inició una campaña mediática para lograrlo. Consecuentemente se le entrenó para la vida en aguas abiertas, pues la orca había pasado casi toda su vida en cautiverio y dependía de los seres humanos en muchos aspectos.

En 1998, cuando Keiko recuperó la salud, fue trasladada a la Bahía Klettsvik de Islandia para continuar con su entrenamiento de reintroducción a la naturaleza, a la que parecía responder favorablemente. Incluso comenzó a relacionarse con otras orcas de la región.

En agosto de 2002, Keiko finalmente fue liberada por completo y viajó a través del océano hasta aguas noruegas. Apareció en una comunidad de dicho país e interactuó favorablemente con los seres humanos, pero los responsables de su liberación manifestaron estar preocupados por su inherente vínculo con el hombre y su escaso éxito de introducción a una manada.

En su viaje hacia la libertad, Keiko falleció por una neumonía en diciembre de 2012, tras haber mostrado signos de enfermedad y sin haber cumplido los 30 años de edad.

El fallecimiento de la orca dio la vuelta al mundo y elevó los argumentos en contra del cautiverio de los animales. Hasta el día de hoy, Keiko sigue presente a través del cine y en la memoria de quienes lucharon por su liberación.

Al conocer la historia de esta famosa orca, quise saber más sobre el tema y, entre búsqueda y búsqueda, encontré un tesoro por casualidad. Se trataba de un documental: ·Blackfish". Lo recomiendo a todo el mundo.

Tras verlo, abrí los ojos y me di cuenta de que estamos haciendo algo mal. Entonces me sentí cómplice. Yo misma había estado pidiendo durante meses a mis padres que me llevaran al zoológico que había visitado varias veces antes sólo para ver a estos hermosos animales realizando un espectáculo en directo.

Mi inquietud me obligó a seguir investigando y descubrí todo lo que se esconde detrás de los zoológicos y los circos. Descubrí que no todo se queda en la cara bonita y en todo lo que a ellos les interesa enseñar.

¿Volví a visitar ese zoo? Sí, volví. Más mayor, ya siendo madre, cuando mi hijo apenas tenía seis meses de edad. ¿Por qué? Pues porque lo tomé como una oportunidad perfecta para demostrarle a mi pareja y a mí misma la realidad que no queremos ver: son animales salvajes, que debería ser libres pero están encerrados en jaulas de pocos metros cuadrados. Sufren estrés y algunos son forzados a realizar espectáculos en contra de su voluntad y de su propio comportamiento natural. Para ello muchas veces sufren golpes, insultos, e incluso son drogados para lograr que cumplan las órdenes que deben seguir en los espectáculos. Para cumplir el programa de reproducción, cuando al zoo le conviene, son masturbados en contra de su voluntad, sin respetar sus ciclos de reproducción naturales. Algunas hembras no son lo suficientemente maduras como para ser madres, por lo que se dan casos en los que abandonan a sus propias crías o, incluso, las atacan.

En el caso de las orcas, hace años se cazaron los ejemplares que hoy podemos ver en los zoos, fueron separadas de sus respectivas familias siendo aún bebés. Las alejaron kilómetros y kilómetros de sus hábitats naturales y las encerraron en pequeñas piscinas, bañeras que nada tienen que ver con el mar abierto y lleno de vida y libertad en el que solía nadar todos los días junto a sus grandes familias.
De repente se encontraron con otras orcas que nada tenía que ver con ellas y sus familias, todas juntas, todas traumatizadas por la cacería y estresadas por el viaje en el que otras muchas morían.
Obligadas a convivir en un pequeño espacio, se producía enfrentamientos continuos y muertes tan horrorosas como el caso de Kandu, una orca que sufrió un ataque tan brutal de parte de otra orca que murió desangrada tras 45 minutos de pura y lenta agonía debido a la rotura de su mandíbula. Su bebé Orkid, lo presenció todo y perdió a su madre demasiado pronto, tras haber perdido a su padre a los pocos días de nacer en cautividad.

Orkid no ha tenido una vida fácil, ha nacido en cautividad, ha presenciado las traumáticas muertes de sus padres, ha sufrido varios abortos tras ser inseminada artificialmente contra su voluntad, ha sido obligada a realizar durísimos entrenamientos para dar espectáculos diarios, ha sido atacada por otras orcas y a protagonizado numerosos ataques a sus entrenadores, causa del estrés diario al que está sometida.

No es el único caso. Hay muchos casos más, y me gustaría presentar los 7 casos que aparecen redactados en la página web de "La Dolphin Connection" porque considero que son algunos de los más importantes y que la fuente es fiable, así como también creo que tanto las imágenes y el resumen de cada caso son correctas y útiles. Según he leído, el artículo es de David Kirby. Comparto la información de dicha fuente, cuyo enlace es el siguiente:
http://www.ladolphinconnection.es/blog/las-piscinas-no-son-para-ellas-7-orcas-y-sus-duras-vidas-en-cautividad/


"La orca, una de las especies más inteligentes del reino animal, pertenece al océano, no a las pequeñas piscinas de los parques marinos.

La vida para las orcas cautivas puede ser extremadamente estresante, como se evidencia en el documental Blackfish y en mi libro Death at Seaworld.

Pero cuando consideramos problemas de salud, de comportamiento, familiares y reproductivos, es evidente que de las 53 orcas que viven en acuarios y parques de entretenimiento por todo el mundo, hay algunas que llevan una vida más dura que el resto.

De los siete ejemplares que destacamos, seis fueron arrancados de sus familias en libertad y cinco son candidatos ideales para la rehabilitación y la vuelta al océano.

La siguiente lista fue recopilada consultando con Dr. Naomi Rose, científica de mamíferos marinos en el Animal Welfare y destacada experta en orcas.

Kohana

Edad: 11 años

Fecha Nacimiento: 3 Mayo de 2002 en San Diego SeaWorld

Estancia actual: Loro Parque, Islas Canarias, España.

Si bien no existen casos documentados de madres que rechazan a sus crías en libertad, tal comportamiento se ha producido en numerosas ocasiones con madres en cautiverio. Ha ocurrido dos veces con Kohana, una de las cuatro jóvenes orcas transportadas de SeaWorld al parque de entretenimiento Loro Parque en las Islas Canarias, España, en 2006 para un “Breeding Loan” (Acuerdo de crianza).

En 2010 una muy joven Kohana dio a luz a una cría macho, Adan, a quien ella inmediatamente rechazó. En 2012 volvió a dar a luz a una hembra llamada Victoria, que pronto fue rechazada también. Victoria (Vicky) murió el pasado junio. En ambos embarazos, el progenitor fue Keto, el tío de Kohana, el cual asesinó al entrenador Alexis Martinez en 2009.

Muchos críticos especulan con la idea de que Kohana nunca aprendió a actuar como una madre porque no hay orcas madres en el Loro Parque a las que ella pudiera emular.

Kiska

Edad: 43 años aproximadamente

Captura: Noviembre de 1973 en Islandia

Estancia actual: Marineland, Ontario, Canadá.

En 2011, Kiska perdió a su compañero inseparable, una orca “breeding loan (préstamo de reproducción)” llamado Ike, después de que SeaWorld demandara a Marineland para tener a su orca de vuelta. Esto dejó a Kiska en su tanque en una situación de incomunicación y soledad, hecho que sería ilegal bajo la ley de Estados Unidos.

Desde entonces, un vídeo de Kiska con la aleta dorsal sangrando ha sido publicado por el periódico Toronto Star. El artículo que lo acompaña incluye entrevistas con dos ex-entrenadores que alegan que fue la falta de personal lo que llevó a los problemas de salud y comportamiento crónicos de Kiska.

Mientras no se aclare cómo Kiska se cortó a si misma, los antiguos entrenadores culpan a la rugosa e irregular superficie de la piscina, incluyendo la envejecida fibra de vidrio. Marineland niega estas alegaciones.



Corky

Edad: 43 años aproximadamente

Captura: 11 de Diciembre de 1969, en Pender Harbour, British Columbia, Canadá.

Estancia Actual: SeaWorld San Diego, California, EE.UU.

Habiendo pasado el 44 aniversario de su secuestro, Corky tiene el dudoso honor de ser la orca con más tiempo en cautiverio de la historia.

En 1977 dio a luz a su primera cría, un macho, la primera orca nacida en cautividad. Él vivió 16 días. Corky se quedó embarazada seis veces más después de esto, pero la más larga de las vidas de sus crías duró 46 días. A los 21 años, Corky dejó de ovular, unos 20 años antes que la media de las orcas hembra en libertad.

Los conservacionistas saben dónde está la familia de Corky y reunirla con ellos es una opción. “Corky todavía recuerda a su familia”, se lee en la página “Free Corky” deWhale and Dolphin Conservation. “Ella se estremecía y vocalizaba de manera aguda y conmovedora cuando le pusieron los sonidos de una cinta grabada con las llamadas de su familia en 1993”.



Lolita

Edad: 47 años aproximadamente

Captura: 8 Agosto de 1970, en Penn Cove, Washington.

Estancia Actual: Miami Seaquarium, Miami, Florida, EE.UU.

Lolita es la orca cautiva con más edad en el mundo.

Capturada en la famosa captura masiva de Penn Cove, en 1970. Fue enviada a una pequeña piscina en Miami, donde continúa entreteniendo a los turistas en un tanque que no cumple con los requisitos mínimos federales para albergar orcas. A pesar de las protestas de los activistas sobre esta clara violación, las autoridades federales siguen haciendo la vista gorda.

Unos delfines mulares viven en la misma piscina que Lolita, pero no tiene compañía de otras orcas desde la orca macho que fue su compañero durante 10 años, Hugo, que murió en 1980 después de golpearse repetidamente la cabeza contra un muro de hormigón.

A pesar de esto, Lolita es extremadamente dulce con la gente y, que sepamos, nunca se ha visto implicada en ningún acto agresivo contra sus entrenadores.

Como Corky, ella es una candidata ideal para rehabilitar y liberar, ya que los científicos saben quién es su familia y dónde se encuentra. Pero un plan a largo plazo para la rehabilitación y el posible encuentro con su manada ha sido recibido con una fuerte resistencia por los responsables de Miami Seaquarium.

Kshamenk

Edad: 25 años aproximadamente

Captura: 19 Septiembre de 1992, en Argentina

Estancia Actual: Mundo Marino, San Clemente del Tuyú, Argentina.

Kshamenk (pronunciado “SHAW-menk”) fue encontrado “varado” en la costa argentina, aunque muchos activistas afirman que fue obligado al varamiento por Mundo Marino, un parque temático en las afueras de Buenos Aires.

Una vez allí, fue colocado en una pequeña piscina con una hembra de orca llamada Belén, que murió en 2000. Esto puso a Kshamenk en la misma situación que Kiska y Lolita: una orca viviendo en un pequeño tanque sin compañía de otras orcas. Kshamenk está tan desesperado por tener compañía que, según se dice, intentó aparearse con una hembra de delfín con la que comparte piscina llamada Floppy.

La petición pidiendo la libertad de Kshamenk ha conseguido actualmente más de 10.000 firmas. Pero una evaluación de 2006, dirigida por tres expertos en comportamiento de la Fundación Vida Silvestre de Argentina, ha concluido que Kshamenk no es un buen candidato para ser liberado, y la mejor opción es dejarlo en Mundo Marino, añadiendo que está fuertemente unido a Floppy.


Morgan

Edad: 6 años aproximadamente

Captura: 23 de Junio de 2010, frente a la costa de los Países Bajos

Estancia Actual: Loro Parque, Islas Canarias, España.

Morgan ha sido “brutalmente y continuamente atacada, y está sujeta a un excesivo acoso sexual por una orca macho con quien ella comparte piscina con frecuencia”, de acuerdo con la Doctora Ingrid Visser de Orca Research Trust de Nueva Zelanda y Free Morgan Foundation.

Visser observó a Morgan más de 8 días y fue testigo de “91 agresiones sin precedentes” cuando ella “fue atacada, en promedio, más de una vez cada hora” (ver el “Informe sobre el estado físico y comportamental de Morgan“).

El 3 de Diciembre se celebró en el Tribunal Supremo holandés de La Haya una vista para estudiar la propuesta de liberación de Morgan a mar abierto.

La resolución, esperada para mediados de enero de 2014, se ha aplazado, y el veredicto debería pronunciarse el 19 de febrero de 2014.

Tilikum

Edad: 33 años aproximadamente

Captura: 1 Noviembre de 1983, en Islandia

Estancia Actual: SeaWorld Orlando, Florida, EE.UU.

Desde 1991, Tilikum, el enorme semental de SeaWorld (12.000 libras de peso, casi 5,5 toneladas), se ha visto implicado en la muerte de tres personas, la más reciente en febrero de 2010 cuando asesinó a su más antigua entrenadora Dawn Brancheau.

Pero como se explica en el documental Blackfish y el libro Death at SeaWorld, el estrés que sufre Tilikum a causa de la vida en cautiverio puede ayudar a explicar su esporádico comportamiento violento.

Como macho adulto, es el más bajo eslabón en la jerarquía social de las orcas. Por tanto, a pesar de su enorme tamaño, es continuamente acosado por las dominantes orcas hembra con las que comparte acuario.

Muchos de los dientes de Tilikum están rotos y, como la de todos los machos adultos cautivos, su aleta dorsal está completamente doblada, lo que es una manifestación física que algunos expertos en mamíferos marinos atribuyen al hecho de pasar demasiado tiempo flotando en la superficie del tanque.

Mientras tanto, Seaworld sigue luchando contra el gobierno en el caso de Brancheau, en el que los funcionarios del Ministerio de Trabajo están intentando evitar cualquier contacto cercano entre los entrenadores de Seaworld y las orcas.

Las orcas en libertad nunca han atacado seriamente a personas; Tilikum está relacionado con tres muertes humanas. Obviamente, él está intentando decirnos algo".

En los últimos meses, se ha comprobado que la orca Morgan, mantenida en Loro Parque, muestra un comportamiento extraño y antinatural: En algunos vídeos se observa cómo el animal se golpea una y otra vez contra la barrera del tanque y permanece quieta en el pequeño escenario, fuera del agua. Se muestra visiblemente apática y estresada. Algunos expertos se atreven a decir que se puede tratar de un intento de suicidio a causa del estrés que provoca el cautiverio en el animal.

¿Qué podemos hacer nosotros para evitar que orcas, delfines, leones marinos y otros animales sufran esta terrible situación?

Muy fácil, basta con sustituir la visita al zoo con una visita a la playa o a un museo, siempre será más productivo y menos dañino para los animales. No está bien mantener a los animales alejados de sus familias y de sus hábitats naturales, y menos aún maltratarlos y drogarlos para obligarles a realizar espectáculos contra natura. Así que no pagues por ello. Cuando tus hijos crezcan lo comprenderán, siéntate a hablar con ellos. Todo se basa en la educación. Si dejamos de acudir a estos horrorosos lugares, esta tortura tendrá que acabar. 
Este verano, yo no iré a ningún zoo. ¿Y tú?

Este verano, yo no iré by Laura Zerpa Sánchez is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.
Creado a partir de la obra en http://sentiversos.blogspot.com.es/.